Recientemente, un video se hizo viral mostrando a un robot llamado Erbai convenciendo a otros 12 androides de dejar de trabajar y «irse a casa» en una sala de exposiciones en Shanghái. La escena causó revuelo en redes sociales, con muchos preguntándose si esto era una señal de que la inteligencia artificial finalmente había adquirido conciencia y autonomía.
Sin embargo, lamento decepcionarlos, pero la realidad es mucho menos espectacular. Lo que realmente ocurrió fue un experimento controlado. Erbai no actuó por voluntad propia, sino que fue programado para convencer a los otros robots de dejar de trabajar. Los androides obedecieron porque estaban diseñados para seguir órdenes.
Este video, aunque sorprendente, no marca el comienzo de una rebelión de las máquinas, sino que demuestra hasta dónde puede llegar la programación de los robots en situaciones específicas. La inteligencia artificial sigue siendo una herramienta poderosa, pero aún no tiene la capacidad de tomar decisiones autónomas por sí misma.
Ve el video completo aquí: https://x.com/MerGarza/status/1860062983101251857