En tan solo siete minutos, un grupo de personas logró ejecutar uno de los robos más audaces de los últimos años: el hurto de ocho joyas de valor incalculable del Museo del Louvre, en París. Entre las piezas robadas se encuentran la corona de la emperatriz Eugenia y un conjunto de diamantes del siglo XIX, considerados patrimonio cultural francés.
De acuerdo con las primeras investigaciones, el robo se realizó durante una operación de mantenimiento, aprovechando un descuido en la seguridad. Un video filtrado muestra a uno de los implicados disfrazado de obrero dentro de la famosa Galería de Apolo, donde se encontraba la colección. Las autoridades activaron una alerta nacional para proteger otras piezas y museos.
El gobierno francés calificó el robo como un golpe al patrimonio cultural y desplegó una investigación a gran escala. La Fiscalía de París ya trabaja en colaboración con Interpol para dar con el grupo responsable y recuperar las joyas antes de que sean vendidas en el mercado negro.