En la Ciudad de México, una innovadora iniciativa de Terapias Asistidas con Animales está ayudando a cambiar la experiencia de los niños hospitalizados. En el Hospital Pediátrico Coyoacán, un equipo de perritos de terapia se dedica a brindar alegría y confianza a los pequeños pacientes.

Estos perritos, cuidadosamente seleccionados y cuidados para garantizar su bienestar y el de los niños, visitan a los pacientes hospitalizados, proporcionando momentos de distracción y apoyo emocional en medio de sus tratamientos médicos. Esta interacción no solo les da ánimo, sino que también les permite olvidarse, por un rato, del entorno hospitalario y de su enfermedad.

Desde que se implementó este programa, los perritos de terapia han participado en más de 3,300 intervenciones terapéuticas, ofreciendo compañía y generando un ambiente positivo y reconfortante. La presencia de los perros ha demostrado ser una herramienta poderosa en la mejora del estado emocional de los niños, ayudando a reducir el estrés y promoviendo una mayor sensación de bienestar.

Este enfoque innovador destaca la importancia de la conexión emocional en el proceso de recuperación y demuestra cómo los animales pueden ser aliados en el ámbito de la salud, especialmente en situaciones tan delicadas como la hospitalización infantil.