La inteligencia artificial (IA) está dando un salto en la medicina con el desarrollo de Google DeepMind, un sistema capaz de identificar mutaciones genéticas que causan enfermedades con una precisión del 89 %. Esta innovadora tecnología ya se está probando en el sistema de salud británico y podría cambiar la forma en que diagnosticamos y prevenimos enfermedades hereditarias.
A diferencia de los métodos tradicionales, que pueden tardar años en identificar patrones genéticos, esta IA analiza secuencias de ADN en cuestión de horas, acelerando el proceso de investigación y facilitando tratamientos personalizados. Los expertos creen que su impacto será tan grande como el descubrimiento del genoma humano.
Si esta tecnología sigue avanzando, podríamos estar ante una nueva era en la biomedicina, donde la detección temprana de enfermedades como el cáncer o trastornos neurológicos sea más rápida y efectiva. ¿Estamos cerca de encontrar respuestas a los misterios genéticos que han desafiado a la ciencia por décadas?