Momentos de tensión vivieron más de 160 pasajeros a bordo de un vuelo de Air China cuando una batería de litio explotó dentro de la cabina, provocando fuego y una densa nube de humo. La situación causó pánico entre los viajeros, mientras la tripulación actuaba rápidamente para controlar las llamas y proteger a los pasajeros.
Gracias a la reacción inmediata del personal, el piloto logró realizar un aterrizaje de emergencia en Shanghái sin que se reportaran heridos de gravedad. Los pasajeros fueron evacuados y atendidos por equipos de emergencia en tierra, quienes confirmaron que la situación pudo haber tenido consecuencias fatales si no se hubiera contenido a tiempo.
El incidente ha encendido nuevamente las alertas sobre el riesgo que representan las baterías de litio en vuelos comerciales. Aunque las aerolíneas aplican estrictas regulaciones internacionales, los casos de sobrecalentamiento y explosiones no son aislados. Autoridades chinas ya investigan las causas del suceso y analizan medidas más severas para evitar tragedias similares en el futuro.