Cada vez más usuarios reportan los llamados “cargos fantasma”, pequeñas sumas que aparecen en los estados de cuenta, generalmente entre 10 y 50 pesos. Aunque pueden parecer montos insignificantes, en realidad son un mecanismo utilizado por delincuentes para probar si la tarjeta bancaria está activa y si el cliente presta atención a sus movimientos financieros. En caso de que el cargo pase desapercibido, la situación puede escalar a fraudes de miles de pesos.

Las instituciones bancarias han advertido sobre la necesidad de mantener vigilancia constante en los movimientos de las cuentas, pues estos cobros suelen pasar desapercibidos durante meses. Expertos en ciberseguridad señalan que los estafadores aprovechan la distracción de los usuarios para avanzar con transacciones mayores. Además, recomiendan activar notificaciones en tiempo real para detectar de inmediato cualquier movimiento irregular.

El llamado es claro: no subestimar un cargo pequeño, ya que puede ser la antesala de una pérdida económica grave. La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) insiste en que cualquier cargo no reconocido debe reportarse de inmediato al banco para evitar fraudes mayores. La cultura de la prevención y la atención al detalle en los estados de cuenta son, hoy más que nunca, indispensables.