Un descubrimiento inquietante en Missouri ha encendido las alarmas ecológicas: el hallazgo del pez cabeza de serpiente, una especie invasora capaz de respirar fuera del agua y caminar sobre tierra firme si su piel se mantiene húmeda. El animal, originario de Asia, representa una amenaza severa para los ecosistemas acuáticos de Norteamérica.

El pez cabeza de serpiente es conocido por su apetito voraz y su habilidad para devastar poblaciones de peces nativos, afectando el equilibrio de lagos, ríos y humedales. Su presencia en Estados Unidos podría causar pérdidas ecológicas enormes y alterar de forma irreversible los ecosistemas locales, afectando también la pesca comercial y recreativa.

Las autoridades de Missouri han advertido que es ilegal poseer, transportar o liberar estos peces, y han pedido a la población reportar cualquier avistamiento de inmediato. Programas de control y erradicación están en marcha para contener la propagación de esta especie antes de que sea demasiado tarde para los ecosistemas afectados.