Un amplio grupo de transportistas, productores de maíz, frijol, caña y café anunció un paro nacional que afectará carreteras estratégicas en al menos 24 estados de México. La movilización responde a denuncias de falta de protección y abandono por parte de las autoridades hacia los trabajadores del campo, quienes aseguran que las condiciones de inseguridad y costos operativos han ido en aumento sin recibir apoyos reales.

Los organizadores reclaman una atención urgente al campo mexicano, incluyendo mayores garantías para la seguridad en las rutas de transporte, la reducción de peajes y políticas que favorezcan una producción agrícola sostenible. Según los manifestantes, muchos productores han sufrido pérdidas por robos, asaltos a camiones de mercancía y falta de infraestructura básica, lo que ha llevado a un punto de quiebre que solo puede resolverse con un diálogo nacional.

Diversas cámaras empresariales y organizaciones campesinas ya han expresado apoyo a algunas demandas, aunque advierten que las interrupciones en vías clave podrían afectar la distribución de alimentos en todo el país. Las autoridades federales han convocado mesas de negociación, pero el paro ya genera preocupación por su impacto económico y social, especialmente si se prolonga.