El Paquete Económico 2026 presentado por la Secretaría de Hacienda contempla un aumento significativo en los impuestos aplicados a cigarros y bebidas azucaradas, con el objetivo de recaudar más recursos y reducir el consumo de productos vinculados a enfermedades crónicas. De aprobarse la medida, una cajetilla de 20 cigarros pasará de costar entre 70 y 80 pesos a un rango de 90 a 100, mientras que un refresco de 600 mililitros incrementará su precio de 20 a 23.50 pesos.

La propuesta ha generado un amplio debate entre especialistas en salud y economía. Por un lado, se sostiene que el ajuste podría disminuir el consumo de tabaco y bebidas azucaradas, contribuyendo a la prevención de enfermedades como la diabetes y distintos tipos de cáncer. Por otro, se advierte que los incrementos afectarán directamente al bolsillo de millones de consumidores que verán encarecerse productos de alto consumo cotidiano.

De acuerdo con autoridades federales, los ingresos adicionales serían destinados a programas de salud pública y atención a enfermedades crónicas. Sin embargo, aún persisten dudas sobre la transparencia en el uso de esos recursos, así como sobre la efectividad real de la medida en la reducción del consumo. El Congreso deberá discutir y aprobar la propuesta en los próximos meses, en un contexto de polarización sobre su impacto social y económico.