Reír no sólo es un acto espontáneo o social: puede ser una verdadera herramienta terapéutica. Investigadores de la Universidad de Jaén, en España, analizaron 33 estudios con más de 2 mil adultos y concluyeron que la risa tiene efectos directos y significativos sobre la ansiedad y la satisfacción personal. En otras palabras, la famosa risoterapia funciona y puede ser una aliada real contra el estrés.

De acuerdo con el estudio, reír provoca una mejor oxigenación en la sangre, estimula la liberación de endorfinas (las hormonas del bienestar) y relaja los músculos. Además, fortalece el sistema inmunológico y puede incluso aliviar el dolor físico gracias a su efecto analgésico natural. Los beneficios no dependen de la edad ni del estado de salud previo, por lo que cualquier persona puede aprovecharlos.

Los científicos recomiendan incorporar momentos de risa a la rutina diaria: ver una película divertida, compartir tiempo con personas con sentido del humor o practicar dinámicas de risoterapia en grupo. Aunque parezca simple, este hábito puede generar cambios profundos en el bienestar emocional si se practica con regularidad.