Según la Organización Mundial de la Salud, uno de cada tres adultos en el planeta no realiza suficiente actividad física. Y los datos son preocupantes: Emiratos Árabes Unidos lidera la lista con un 66% de personas sedentarias, seguido por Kuwait (63%) y Japón (52%). La inactividad no sólo es una cuestión de estilo de vida: es un factor de riesgo que se relaciona directamente con enfermedades cardiovasculares, obesidad, ansiedad y depresión

La OMS recomienda al menos 150 minutos semanales de actividad física moderada, pero cada año más personas abandonan el movimiento. El aumento del teletrabajo, el uso excesivo de pantallas y la urbanización sin espacios adecuados para ejercitarse están contribuyendo a una crisis silenciosa que afecta tanto a la salud física como mental.

No se trata sólo de hacer ejercicio, sino de moverse más durante el día: caminar, subir escaleras, evitar el auto en trayectos cortos. En un mundo que avanza rápido, el sedentarismo se ha convertido en uno de los peores enemigos de la salud pública. La pregunta no es si tenemos tiempo, sino si estamos dispuestos a encontrarlo.