La tensión comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea se intensifica luego de que el presidente Donald Trump anunciara su intención de imponer un arancel del 200% a todas las bebidas alcohólicas europeas. Esta medida sería una respuesta a los impuestos que la UE busca aplicar al whisky estadounidense, lo que podría generar una nueva guerra comercial entre ambos bloques.

De concretarse, los precios de vinos, champán y licores europeos se dispararían en el mercado estadounidense, afectando tanto a importadores como a consumidores. Además, esta decisión podría provocar represalias por parte de la UE, complicando aún más las relaciones comerciales y generando incertidumbre en el sector.

Expertos advierten que este tipo de medidas podrían impactar la economía global, afectando las exportaciones, el empleo y los precios de productos clave. La postura comercial de Trump sigue generando controversia y podría redefinir el equilibrio entre las grandes potencias económicas.