En la frontera entre Argentina y Uruguay, un fenómeno inquietante está llamando la atención de científicos y ambientalistas.
Capibaras teñidos de verde debido a la proliferación de cianobacterias en los ríos. Este problema, causado por el calor extremo y la contaminación, no solo afecta la apariencia de estos animales, sino que también genera un ambiente tóxico con aguas malolientes y peces muertos.
Las cianobacterias, aunque esenciales para el ecosistema, pueden convertirse en un peligro cuando proliferan descontroladamente. El aumento de temperaturas y el exceso de nutrientes en el agua crean condiciones ideales para su propagación masiva, lo que genera toxinas que amenazan la vida acuática y pueden afectar la salud humana. Este fenómeno no es nuevo, pero cada año se agrava más, lo que refleja un preocupante deterioro ambiental.
Este suceso es un recordatorio del impacto del cambio climático y la contaminación en los ecosistemas. A medida que las temperaturas globales siguen en aumento y los ríos reciben más residuos contaminantes, fenómenos como este podrían volverse aún más frecuentes y peligrosos. La pregunta sigue en el aire: ¿se tomarán medidas antes de que sea demasiado tarde?