Una operación policial conjunta entre España y Perú logró desmantelar una red de estafadores que operaba telefónicamente y tenía como principal objetivo a adultos mayores. Las autoridades arrestaron a 83 personas involucradas, quienes lograron defraudar alrededor de 3 millones de euros a más de 10 mil víctimas.
La red criminal, compuesta por 35 detenidos en España y 48 en Perú, realizaba llamadas en las que solicitaban sumas de entre 100 y 200 euros a sus víctimas mediante engaños persuasivos. Este modus operandi afectó principalmente a personas mayores, aprovechándose de su vulnerabilidad para realizar los fraudes.
El caso pone de manifiesto la importancia de proteger y orientar a los adultos mayores frente a este tipo de delitos. Las autoridades instan a la población a desconfiar de llamadas sospechosas y a mantener una comunicación cercana con sus seres queridos para prevenir este tipo de situaciones.
La investigación continúa para identificar a otros posibles implicados y garantizar justicia para las víctimas. Este caso se suma a una creciente lista de crímenes cibernéticos y telefónicos que destacan la necesidad de estar alerta ante nuevos métodos de fraude.