Un hombre murió aplastado por queso. 

Sí, 16 mil piezas de queso le cayeron encima, luego de que colapsara una estantería. 

Giacomo Chiapparini de 74 años de edad era dueño de una fábrica de quesos en Italia. 

Entró a la sala para ver cómo funcionaba un robot automático, utilizado para limpiar las piezas de queso. 

No está claro qué causó el colapso de los estantes, pero básicamente fue un efecto dominó lo que llevó a la muerte al quesero. Tardaron más de 11 horas en encontrar el cuerpo del señor, debajo de los bloques de queso. 

El señor fundó la fábrica en 1970 y nunca había pasado algo similar.

Historias como esta nos hacen reflexionar sobre la vida y la muerte que se presenta en el momento más inesperado…