Y con mascota nos referimos a perros y gatos. En este video, vamos a compartirte una lista sobre los cuidados que debes tener si vives con dichos animales.
Comenzamos con:
- Si sacas a pasear a tu perro o gato, no lo hagas durante el rango del día en donde la temperatura está en su punto más alto, con más calor. Generalmente esa hora es a mediodía y hasta las 4 de la tarde. Lo ideal es que te levantes temprano para pasearlo o de lo contrario que sea hasta en la noche.
- Cuida sus patas. La superficie que pisan los afecta de manera directa. Es decir, si los sacas a pasear por asfalto caliente esto aumenta su temperatura corporal y pueden terminar teniendo un golpe de calor. Por esto es fundamental que te asegures de no pasearlos por superficies muy calientes y una muy buena práctica es que con una toalla puedas humedecer las almohadillas de sus patas.
- Asegúrate que siempre tengan agua limpia disponible. Con las precauciones por el dengue y el calor extremo, no es raro que a veces sus platos de agua estén vacíos. Por eso es fundamental que los revises dos a tres veces al día, les renueves el agua y así te asegures de que tengan agua limpia disponible a toda hora.
- No los dejes encerrados y asegúrate que siempre tengan un lugar de sombra. Las mascotas sufren esa misma sensación de ‘sofocamiento’ que nosotros y por esto es clave que no estén expuestos al sol directo por mucho tiempo y en los peores horarios.
- No los vistas. Parece obvio pero con el costado más fashionista del universo de las mascotas, no es raro ver a perros y gatos vestidos. Mientras que en la mayoría de los casos es un detalle coqueto, es importante durante el verano evitar este tipo de prácticas. La lógica es la misma que con las personas: mientras más capas de ropa tengamos, más calor sufrimos.