La clave para evitar la demencia puede ser algo tan simple como platicar, convivir con gente, disfrutar de una buena charla, puede ser la salvación ante este problema de salud mental.
Expertos de Harvard y la Universidad de California-San Francisco hicieron un estudio en el que se demostró que los pacientes con una edad promedio de 80 años presentaban disminución en la memoria, al mismo tiempo en que perdían conexiones sociales.
O sea que entre más se aíslan nuestros abuelitos, más riesgo hay de que aparezca la demencia o se intensifique.